Los artesanos Silverio López y José Ángel Hernández guían a los visitantes a través del legado de la cerámica local.
El Museo Arqueológico de Fuerteventura recibió con entusiasmo una nueva jornada del Ciclo Cultural Erbania, donde los alfareros Silverio López y José Ángel Hernández sumergieron al público en el fascinante mundo de la cerámica indígena de Fuerteventura. A través de las piezas resguardadas en el recinto museístico, los asistentes exploraron la rica tradición de la cerámica popular de la isla. Luego, Silverio López presentó su libro «Manual de Alfarería Canaria», en colaboración con la Asociación Cultural Pueblo Maho, entidad que respalda esta nueva edición.
El «Manual de Alfarería Canaria» busca detallar minuciosamente la técnica de elaboración de la cerámica tradicional que ha perdurado hasta nuestros días, así como las variaciones y particularidades técnicas de los diversos alfares de las islas. Este conocimiento ancestral, que se remonta al neolítico y ha transitado desde el norte de África hasta las Canarias, aún se conserva. Los canarios se enorgullecen de ser custodios de esta técnica milenaria, cuya evolución no ha impedido que mantenga su esencia.
El programa cultural también incluyó el espectáculo «Onírica», una fusión de danza, proyección y poesía creado por María José Guerra y la academia de danza Entre Siluetas. Inspiradas en obras pictóricas del reconocido pintor canario Juan Guerra, se presentaron tres piezas de danza contemporánea acompañadas de música compuesta por el músico majorero Álvaro Moro Lorenzo y poesía dedicada al artista.
En mayo, el Ciclo Cultural Erbania explorará los molinos de mano de las culturas indígenas canarias con la presentación del libro «Molinos de mano guanches de las Cañadas del Teide», a cargo de Matilde Arnay, doctora en Historia por la Universidad de La Laguna, y Efraín Marrero, arqueólogo licenciado en Historia por la misma universidad. Esta cita incluirá una visita al almacén de fondos del museo, donde se exhibirán los molinos de mano de la cultura del pueblo majo bajo la custodia del Cabildo de Fuerteventura.
